lunes, 6 de abril de 2020

Tesis sobre una domesticación

"Mientras una cumbia caliente se prendía a la concurrencia, él la observaba. Sentía miedo, mirarla le producía terror. En su libro El sexo y el espanto, Pascal Quignard dice que el miedo y el deseo provienen de la misma raíz y debe tener razón porque era justo lo que experimentaba el abogado por esta actriz. Ganas y miedo."

"Una mugre material entristecía su amor de madre. Ese no saber ser madre y sin embargo serlo. No estar ahí para las cosas más elementales, como el amor."

"Se pone en cuclillas justo delante de la cerradura y lo ve todo. Ve como vive el sexo un heterosexual raso. No es ninguna novedad para ella. Lo sabe desde siempre, el trámite sin sentido que es la sexualidad para ellos. Y para la amante también. Todo el teatro con el que ella intenta consolarlo de algo, toda esa gestualidad aprendida del porno y de las demandas masculinas, los gemidos de gatita loca con que ella parece decirle lo buen amante que es, lo bien que la coge, lo mucho que la siente y lo grande que la tiene. La actriz está excitada con ese bocado de carne para su voyeurismo, le gusta estar ahí, pero no puede dejar de divertirse al ver lo lejos que se encuentra esa teatralización, de ella misma y de su vida sexual."

"El viaje a la infancia de la felicidad, que nada tiene que ver con una infancia feliz."

"Los hijos también dictan la vida de sus padres."

"¿Por qué las familias que ya están rotas intentan suturarse con asados los fines de semana?"


1 comentario:

Unknown dijo...

Leeré ese libro!!!!