domingo, 3 de mayo de 2020

El peso del mundo en cuarentena III

Ayer T. me dijo: "Gracias por hacer de esta una cuarentena inolvidable."

Ganas de abrazar a un niño.

Noticia: "Turquía. Cayó al vacío mientras se sacaba fotos festejando el fin de la cuarentena."

La creencia de que mi estado físico cambia de acuerdo a si estoy vestida con ropa de calle o en pijama. En pijama mi cuerpo se ha deteriorado mucho. Vestida de calle estoy bien.

Mi gran objetivo de esta cuarentena es cicatrizar.

Después del maravilloso "Stoner", lamento que hayan publicado "Solo la noche", la primera novela de John Williams. En realidad lo que lamento es haberla leído...
Igual esto me gustó:
"Así que mientras caminaba por la calle desbordada en esa noche de verano intensa surgió en él aquella soledad característica que se siente sólo en la impersonalidad monstruosa de la multitud, esa sensación incomparable de puro aislamiento ajena a cualquier otra circunstancia. Una figura solitaria sobre una extensión desértica inmutable no está tan sola como alguien que se pierde en la infinitud de una ciudad abarrotada. Aquel que está solo en el desierto siempre es consciente de su propia importancia, aunque sea mínima, y de su relación con el espacio visible. Pero el solitario en medio de una multitud pierde consciencia de sí mismo como individuo. Los cientos de cuerpos extraños que lo aprietan sin notarlo, los centenares de miradas ajenas que lo observan inexpresivas y sin comprensión, las voces que hablan por encima, a su alrededor, pero nunca con él; ahí esta la verdadera soledad."

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