jueves, 23 de agosto de 2012

Lo nuestro es puro teatro

Frente a la indigente cartelera cinematográfica, T. y yo estamos yendo mucho al teatro. Para ir al teatro no hay que pensar más que para ir al cine, no es algo tan especial ni diferente, sólo hay que meterse en una página web (o llamar) y asegurarse las entradas que cuestan poco más que las de la pantalla grande. (El cine se volvió loco.) Llegado el día del evento, simplemente se debe tomar algún transporte o mover las piernas. Buenas obras para empezar con la costumbre: "El viento en un violín" y la ya superfamosa "Omisión de la familia Coleman".

1 comentario:

María dijo...

Otra para ver:

"El pasado es un animal grotesco"