lunes, 16 de abril de 2012

Necesitamos hablar de Kevin

No llamaría “recomendar” a lo que voy a escribir acerca de “We need to talk about Kevin”. ¿Cómo voy a recomendar una película que me tuvo con un nudo en el estómago durante dos horas? No, no puedo decirles vayan al cine que les va a gustar.

Pero tengo que escribir sobre Kevin, sobre la lucidez de su “terror psicológico” que termina planteando una cuestión filosófica: ¿venimos al mundo con personalidad propia o somos reproducciones de nuestros padres y consecuencia de lo que ellos nos transmiten?

La maternidad, los vínculos, la maldad proyectada, la genética, la personalidad, la víctima-victimaria, el masoquismo. La historia te revuelve en lo visceral para terminar en lo intelectual; y encima toca la problemática actual de la violencia norteamericana.

Las actuaciones son maravillosas, Tilda Swinton es una de las mejores actrices del momento y cada uno de los Kevins está mejor que el otro (y lo lindos que son). Que John C. Reilly hace muy bien de tonto no es ninguna novedad.

Me encantó la película, me hizo pensar mil cosas pero no, no la recomiendo porque es durísima. Si alguien ya la vio por favor que haga algún comentario, que no la recomiende no significa que no quiera hablar de ella. Todo lo contrario, necesito hablar de Kevin.

9 comentarios:

eliana dijo...

La vi a partir de este post... yo también necesito hablar de Kevin! No quiero que estos comentarios se transformen en un espoiler tampoco, pero siento que es una película que tiene 7878676786785 cosas debajo de la superficie, que uno va entendiendo a medida que pasan los días. Puede ser?

María dijo...

Totalmente. Mil cosas: el vestuario (ella usa para la fiesta de la oficina el mismo vestido que cuando le sacan el ojo a la hija, qué mujer hace eso?); el diálogo que tienen en la espera del hospital acerca de quién dejó el frasco al alcance de la niña; la escena del vestuario de damas cuando están las embarazadas expuestas de una manera desagradable; su actitud frente a la gordura; el juego del disco con virus "I love you"; y mil cosas, sobretodo el final, cuando ella le prepara el cuarto y la cama replicados en su nueva casucha... Y le pregunta por qué? A Kevin se lo ve por primera vez angustiado y respone algo así como "por primera vez me lo pregunto". POR ELLA! Ella los mató... Bueno, y mil cosas más.
Besos Eliana! Qué bueno que sigas por acá y espero que tus cosas estén bien.

eliana dijo...

jajaj si, en esa escena final parece que le dijera "lo hice para esto, para tener toda esta atención que ahora tengo". Se lo nota humano a él por primera vez.
Me gusta mucho como juegan, sobre todo al principio, con las imágenes que la muestran a ella siendo él y a él siendo ella.
Todo ese desprecio que se le ve a ella (o falta de alegría al menos) durante el embarazo, esa desconexión con el hijo por más que le sonría e intente jugar... todo! Y hasta te hace dudar de si esa apatía del nene con ella, ese odio que de a poco le empieza a mostrar no es en realidad de ella hacia él todo el tiempo y el nene es en realidad como lo ve el padre.
Me pareció buenísima y me dieron ganas de leer el libro!

Yo ando muy bien, espero que tus cosas también estén bien! :) Besos!

María dijo...

Sí, hay que leer el libro, buena idea.
Gracias!

Fabarafa dijo...

Gran película

Ya que querías hablar de ella, te comparto una pregunta que surgió a la salida del cine. Mi novia (estudiante de trabajo social) remarcaba la falta de intervención de terceros, ya sea asistentes del colegio o profesionales buscados por la madre.

Creen que esto podría haber modificado el desenlace?

Creen compatible con el personaje de la madre el recurrir a ayuda externa?

La supuesta imagen de familia en orden que ve el padre y su buen pasar económico son elementos que funcionan como impedimentos a la hora de pedir intervención de alguien de afuera?

Me encanta que la peli no se limite a señalar culpables con dedo acusador, y siempre es regocijante encontrar gente que disfruta lo que a uno le gusta (lo digo por ustedes, no por Kevin, :).

Saludos de un viejo lector silencioso

Juan Baio dijo...

yo también la vi a raíz del post (aunque ya venía haciendo ruido).
muy buenas tus observaciones María. creo que al final Kevin decía "Creía saberlo, pero ahora no estoy tan seguro"... una posibilidad más nefasta que nunca habérselo preguntado.

está buena porque dispara asociaciones, reflexiones, reacciones corporales... me gusta que eso pase. no sé si una ayuda externa podría haber cambiado el desenlace, Fabarafa... quizá.
Aunque para mí tiene que ver con algo más allá de la lógica causal psicológica ... María habló del tema de la violencia norteamericana. Yo creo que eso circula como un innombrable, determinante, asfixiante, invisible; y ahí está el horror. No hay justificación, no hay explicación, algo de lo que configura y sostiene a esa sociedad, algo que no pueden ver pero que está en todos lados, produce periódicamente un Kevin, y no lo pueden evitar.
Yo creo que debe ser muy fuerte para el que vive inmerso en eso, y para mí la película visibiliza en el plano sensible esa conciencia.

Juan Baio dijo...

en realidad, ¿por qué digo eso? no es que me muestren a Kevin siendo condicionado por su entorno social fuera del hogar, ni nada tan didáctico.. justamente.

al poner la perspectiva en la mirada de la madre, el efecto que me provoca, no es el de buscar reconstruir los indicios que le achaquen a ella una culpa legible, razonable (tranquilizadora para nosotros); más bien me desplaza hacia la sensación de todas esas madres norteamericanas de pequeños asesinos, con sus responsabilidades parciales e insuficientes para explicar (se) el horror que ellas (entienden) engendraron en su vientre.

María dijo...

Hola Fabarafa y Juan,

Con respecto a la intervención de terceros me parece que está claro que hay un goce para ella en la relación, que disfruta, es algo masoquista y por eso permanece ahí (y hasta lo espera con el cuarto igual a Kevin para que al salir de la cárcel todo vuelva a ser como antes).

El vínculo nocivo está dado a través de lo biológico madre-hijo. El padre queda como un agente externo que no se da cuenta de nada y no puede intervenir de ninguna manera, es un espectador imparcial a quien no lo toca el conflicto.

Tengo mi lectura acerca de la niña... Cuando la madre le está haciendo las curaciones en el ojo y se abrazan hay un primer plano final en esa escena en donde se desprende cierta maldad de la mirada pirata de la pequeña... Como si algo de la semilla de Kevin también estuviese instalado en la niña.

Qué bueno hablar de Kevin... Gracias!

Anónimo dijo...

Ahora te entiendo María. La he visto esta tarde.
Sabes que yo creo que son la misma persona en hombre y en mujer. Los dos tienen la misma personalidad pero con leves diferencias. ¿Por qué la mamá lo sigue visitando si tiene la excusa perfecta para abandonarlo? ¿Es por el amor de madre o algo más? ¿Es por el vínculo del cual hablas la razón por la que no la mató a ella también? Por momentos me dio la impresión que el hijo hace lo que ella realmente desea hacer pero no tiene las agallas para llevarlo a cabo. No sé.
Me gusta como mantiene la presencia del color rojo/tomate que baña la película de principio a fin. La pintura en la casa es obvia, es una buena metáfora para representar en lo que se ha convertido su vida.
~E.