martes, 26 de noviembre de 2013

Mi propio peso del mundo IV

(Cont. del MIÉRCOLES, 16 DE OCTUBRE DE 2013)

¿Y si muero sin conocerme? 

Me he salvado. Llegué al borde del abismo pero me he salvado. Quizás más tarde de lo que hubiese querido, quizás no de la mejor manera, pero me he salvado.

Memo íntimo: cultivar las diferencias.

¿No tengo motivaciones? No manejo la ansiedad.
También puede ser que me levante tan cansada por la calefacción, eso embota y cansa.

La obsesión por anotarlo todo, en todo momento.

¿La gente que camina por la calle se siente bien? Dolor de cabeza, zapatos que lastiman, sentirse hinchado, constipado, la columna, las cervicales, estar agotado, el dolor de muelas. Pocas veces nos sentimos bien con todas las letras. El dolor es lo más íntimo.

El sonido del ascensor como el aullido de un fantasma. Pasa de largo hacia otro piso.

Conectar con otra persona: no se conectan las palabras, ni los gustos, ni las miradas; se conecta algo interno, como un imán que de pronto gira y atrae el imán de otro. La conexión es interna, más poderosa que cualquier actividad o gusto en común.

¿Cuándo nos hacemos viejos nos volvemos más o menos educados? ¿Es posible que nos volvamos menos educados?

"Yo con vos me divierto en todos lados", escribió una amiga en una carta de la infancia.

Siento que me estoy esforzando mucho. Pero es un esfuerzo invisible, estéril. Nadie lo ve excepto yo.

S. decía que yo era como un arquero que atajaba todos los penales, como una Federer, una topadora, que no dejaba pasar una, que me importaba todo. ¿Seguiré siendo así?

¡Cuántas cosas que no logro dejar ir!

Las obsesiones me chupan la mente por turnos.

Al escribir a mano, tachar la palabra equivocada con una sola línea es mucho más prolijo que tacharla con varias. Yo antes la tachaba varias veces con la fantasía de que se notase menos y sin embargo ese manchón llamaba mucho más la atención. En cambio con una sola línea se funde con el resto y pasa desapercibido.

Tranquila. Ir de apoco y no arrebatarme. Escribir, explicar con claridad, tan sólo traducir.

¿Cómo vivir en un mundo que entiendo poco? ¿Confiando?

Es más importante lo que haga y piense que cualquier cosa que tenga o pueda llegar a tener.

¿Cómo sería no tener problemas? ¿Todo perfecto, sin matices y muy, muy plano?

Plantazo familiar.
Constipación creativa.

Debo seguir como un caballo (con la mirada limitada). Esto lo escribí. ¿Por qué? Qué desgraciada...

Entiendo que hay un costado tortuoso en escribir pero no encuentro nada tan maravilloso como expresarme.

Diálogo con madre: "Tuviste hijos y ahora querés que se te reconozca como si hubieses hecho la gran obra de caridad del mundo."

Saltar del tren, si va a lugares a dónde no quiero ir. 

Memo íntimo II: dejar de hacerle caso al miedo.

"El sentimiento de conocer sólo a la gente equivocada."

Me perturba adentrarme en lo que escribo.
Me brotan las ideas como pelos.

Volver a escribir "las páginas de la mañana". Aunque sea por las tardes.

Certeza: nada de lo que estoy buscando está en Internet.

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