domingo, 25 de agosto de 2013

Gracias al amor

Es un milagro que estemos vivos. Es gracias a las personas que tenemos cerca. Literalmente cerca: en la calle, en el avión, en el cine. Si estamos vivos es porque al carnicero no se le da la gana acuchillarnos, porque el verdulero se contiene de darnos una piña en el medio de la cara y tumbarnos de cráneo al asfalto. Vivimos gracias a que la señora que camina en la plaza está demasiado cansada para rociarnos con gasolina y prendernos fuego con un fósforo, gracias al colectivero, que prefiere no atropellarnos como a un perro de ruta. Seguimos acá porque nuestros amigos no se animan a ahorcarnos, porque el chico de la bicicleta prefiere usar su navaja para pelar naranjas, la empleada no tira la plancha por la ventana, el portero no genera un cortocircuito, la abuela no nos envenena el té, el conductor no tiene a quién mandar mensajes de texto camino a Mar del Plata, no tomó, no se drogó.

Somos muy frágiles, pero gracias a este tipo de gente seguimos vivos. Es un milagro, ¿o no? Y después nos escandalizamos porque cada tanto hay algún asesinato o accidente, nos resultan rarezas dignas de semanas de habladurías e hipótesis. A mí lo que me resulta raro es que siendo tantos no nos matemos más. Me extraña mucho y me da terror de sólo pensarlo. Por eso agradezco cierta extrema cordura de la mayoría de la gente, el miedo, cobardía y desidia. Gracias también a una alta dosis de suerte. Y por supuesto agradezco muchísimo al amor, y a las buenas costumbres.

6 comentarios:

Gloria dijo...

Que buena reflexión ahora en vez de temer que me maten voy a agradecer que no lo hagan. Excelente texto!!

Diana Laurencich dijo...

Uh, me encantó...

Clément Cadou dijo...

Hola, María
He leído el texto como lo que inmediatamente es o parece ser: una pequeña digresión optimista sobre el género humano (o algo similar). Sin embargo, me parece que admite una interpretación de segundo grado, para mí mucho más interesante: ¿no es acaso una reflexión irónica sobre la infinita maldad potencial del ser humano? Lo leo, entonces, como un inteligente (y divertido) microensayo teñido de pesimismo antropológico.

Esta segunda lectura me ha recordado a Lydia Davis, una autora cuya lectura me permito recomendarte (te lo digo por tu bien), aunque probablemente ya la conoces.

Te copio un relato breve (y trágicamente cómico) de Davis que he recordado al leer tu texto (la referencia es: Lydia Davis, Cuentos completos, trad. Justo Navarro, Barcelona, Seix Barral, 2011, pág. 400):

'Asesinato en Bohemia'

"En la ciudad de Frydlant, en Bohemia, donde todos son pálidos como fantasmas y visten de negro en invierno, una anciana no pudo seguir soportando el hundimiento fatal de su existencia en la miseria y la ignominia y se volvió loca y asesinó por piedad a su marido, a sus dos hijos y a su hija; por ira, a los vecinos de al lado y a los de enfrente, que habían menospreciado a su familia; por venganza, al tendero, a quien le había suplicado que le fiara, y al prestamista, y a dos usureros, y a un tranviario a quien no conocía y, por fin, penetrando en el ayuntamiento cuchillo en mano, al joven alcalde y a uno de sus concejales, que se devanaban los sesos en torno a una enmienda"

Un saludo.

María dijo...

Gracias Gloria y Diana!

Gracias Clément, la segunda interpretación es la que estaba intencionada, pero sí, es una idea que da para desarrollarse de manera mucho más amplia. Aunque creo que es de optimismo antropológico, porque es un milagro maravilloso que estemos vivos... Y la maldad potencial del ser humano está reprimida por otros sentimientos como el amor, la adaptación, el miedo, la obediencia entre muchas otras cosas, no?

Voy a estudiar a Lydia Davis, no la conozco así que muchas gracias por la recomendación!

Saludos a los tres.

Diana Laurencich dijo...

No la estudies a Lydia, disfrutala...te lo digo por tu bien.

Karen dijo...

no puedo estar MAS de acuerdo. Cuando entra un demente enajenado a una escuela en us y mata a 100 personas, siempre lo pienso: bastante bien nos va! lo raro es que no pase todo el tiempo. :)