El mundo amarillo

Lista de descubrimientos para convertir tu mundo en amarillo:

1. Las pérdidas son positivas. Tenemos que aprender a perder.

2. No existe la palabra dolor. ¿Y si en realidad reaccionamos al dolor tal como nos enseñan las películas sin percatarnos de si en realidad sentimos dolor? ¿Y si en realidad el dolor no existiese?

3. Las energías que aparecen a los treinta minutos son las que solucionan el problema. No debes recibir o dar malas noticias en un lugar en el que has pasado o pasarás mucho tiempo. Siempre hay que encontrar un lugar neutral. Ir a un lugar tranquilo y esperar media hora exacta. Esa media hora es el tiempo que necesita tu cuerpo para tranquilizarse y tu mente para serenarse.

4. Haz cinco buenas preguntas al día. Hacerte preguntas equivale a sentirte vivo.

5. Muéstrame cómo andas y te mostraré cómo ríes. Respiración y movimiento están totalmente relacionados. Anda, respira, ríe y disfruta.

6. Cuando estás enfermo llevan un control de tu vida, un historial médico. Cuando estás viviendo, deberías tener otro. Un historial vital. Lo bueno de escribir las cosas es que te das cuenta de que esta vida es cíclica: todo vuelve y vuelve.

7. Hay siete consejos para ser feliz. Y este es el que te contaré: “Apuntad, hay que saber decir no en esta vida”. No a lo que no deseas. No a lo que todavía no sabes que no deseas pero que deseas. No por compromiso. No si sabes que no podrás cumplir. No al exceso. Y sobre todo: ¡no a ti mismo!

8. Lo que más ocultas es lo que muestra más de ti. Dime tu secreto y te diré por qué eres tan especial.

9. Junta los labios y sopla. El superpoder del soplo. Así que no temas y sopla como mínimo una vez por semana, eso sí, siempre tienes que pedir un deseo.

10. No tengas miedo de ser la persona en la que te has convertido. Respeta tu yo anterior, debes confiar en tu yo antiguo.

11. Encuentra lo que te gusta mirar y míralo. Lo importante no es qué miras, sino qué te transmiten las cosas.

12. Comienza a contar a partir de seis. Piensa bien en lo que piensas. Busca, no te conformes con el primer pensamiento.

13. La búsqueda del sur y del norte. A veces, si tienes suerte de cumplir tus sueños, ves cómo llegas al norte. Mentalmente veo la parte norte de mi vida, entonces busco otro sueño y me digo: “Este debe de estar al sur”. Sur y norte. Sólo eso. Busca el sur, busca el norte. No dejes de ir de uno a otro.

14. Escúchate enfadado. ¿Qué mejor que ser tú mismo quien deba soportar tus gritos?

15. Hazte pajas positivas. Tras dedicarle una paja la suerte va al citado inspirador y te sientes poderoso, dotado de un don.

16. Lo difícil no es aceptar cómo es uno, sino cómo es el resto de la gente.

17. El poder de los contrastes. Yo siempre he creído que cuando juntas dos contrastes algo mágico ocurre. Ejemplos: Una piscina olímpica en un hospital, una bolera en un aeropuerto, una peluquería en un cine, libros en los bosques, bares en los bancos…

18. Hiberna veinte minutos. Quizás parezca meditación, pero en realidad es simplemente estarse quieto.

19. Busca a tus compañeros de habitación de hospital fuera de él. Fijarte en un desconocido. Alguien que te llame poderosamente la atención. Hablarle. Tan sencillo como hablarle. Expresarle lo que te sugiere. Busca la manera de adentrarte en él, suavemente, muy suavemente. Concederle cuarenta y ocho horas. La gente siempre necesita cuarenta y ocho horas para bajar la guardia, para confiar, para ponerse el pijama, para aceptar a alguien. Y a disfrutar de tu compañero/a de habitación.

20. ¿Quieres tomarte un REM conmigo? Sé que algún día llegará un medicamento para dejar de dormir y estoy seguro de que entonces la madrugada, las tres o las cuatro de la mañana, será la hora de una nueva comida: el REM. Tomarás los REMS con gente especial, gente que, como tú, cree en esa hora.

21. El poder de la primera vez. Los “retazos” podrían definirse como cosas que un buen día haces por primera vez y te marcan porque quedan para siempre dentro de ti.

22. Truco para no enfadarse jamás: todo se puede desconectar si no llegas al punto de no retorno.

23. Gran truco para saber si quieres a alguien: cierra los ojos. Cerrar los ojos es como conseguir extraer todos los detalles sin importancia. Lo más increíble es que lo ves todo muy claro.

(Fragmentos de “El mundo amarillo”, de Albert Espinoza)