lunes, 20 de febrero de 2012

De otra II


No sé por qué me dan más vergüenza mis textos que mis dibujos de juventud.


Me sorprende descubrir que mis pensamientos rondaban los mismos lugares.


Y que mis preguntas siguen siendo más o menos las mismas.


Y que esa era yo, dibujando y escribiendo. Me sorprende que hoy sigo queriendo dibujar y escribir y siento que no puedo hacerlo. ¿No puedo hacerlo? Pero si lo hacía a los doce, a los quince. Dibujé algo a los veinte y escribí bastante a los treinta. Documentales, cortometrajes, guiones, cuentos, diarios, este blog. Escribir, escribí.

Pero "dibujar y escribir" para mí siempre significó futuro: lo que voy a hacer cuando sea grande, lo que iba a hacer cuando fuese como soy. Siempre un misterio, una incógnita, un ideal, un proyecto lejano. Nada de lo que haya dibujado o escrito tiene que ver con ese "dibujar y escribir" que soñé de chica. Eso era otra cosa. ¿O será lo mismo?

¿Cómo será mi vida?

3 comentarios:

Dolores dijo...

Lo mismo me pregunto yo.

María dijo...

Justo ayer estuve pensando mucho en vos hermana... Y aparecés por acá. Muchos besos

Dolores dijo...

Siempre ando por acá...