(Cont. del VIERNES 3 DE OCTUBRE DE 2008 y del MARTES 27 DE ENERO DE 2009)
Cuando era más chica pensaba que el interés por la ropa era frivolidad, y que si estaba linda y bien vestida seguro parecía menos inteligente. Qué pava era.
Ahora elijo la ropa según mi estado de ánimo y pensando en las cosas que tengo que hacer. Lo más importante es estar cómoda, la ropa que uso es como un disfraz de mí misma que me pongo todos los días, se tiene que notar que soy yo.
Es verdad que tardo más que antes, cuando pensaba que la ropa no tenía nada que ver conmigo. Pero también me divierto, es un juego que me prepara para lo que venga. Porque como dicen: "no vaya a ser que me cruce con la tristeza y me encuentre mal vestida".
5 comentarios:
Yo después de muchos intentos por parte de mi madre y mis amigas, no logro dedicarle mas de 10 minutos a mi vestimenta sin que se convierta en un proceso tedioso.
en mi caso, lo que tardo y lo que me divierto vienen creciendo ambos muchísimo! pero en estos tiempos, uno siempre anda tan apurado..
Pero la letra està un poquito crecida, no?
Nota, a modo de confesión:
debo admitir que me he sentido totalmente identificada con este post.
Todavía estoy en medio del proceso de pasar de la primera a la segunda etapa que tan bien describís...en algunos días el intento sale mejor que en otros.
Como siempe, un gran saludo y placer
Laura.
Hola! aunque suene frívolo, es mejor estar bien vestida y triste antes que triste y hecha un trapo... totalmente de acuerdo.
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